"Una vez obtenidas las unidades foliculares, ya sea por la técnica fue o la de la tira, en función del área a repoblar, el procedimiento para implantar el pelo es idéntico en ambos casos. El diseño y forma de distribución del pelo que se va a trasplantar se estudia meticulosamente previamente a la intervención entre el dermatólogo y el paciente, para conseguir la perfección estética y un resultado natural."
Actualmente existen dos técnicas para la obtención de las unidades foliculares siendo idénticas el resto de las fases del trasplante.
Ambas técnicas son útiles para trasplante y la elección de una u otra dependerá de cada paciente debiendo los cirujanos utilizar ambas y disponer de equipo técnicos altamente cualificados.
Esta forma tradicional de obtención del pelo ha experimentado importante avances ya que la anchura de la tira ha disminuido considerablemente (de 2.5 a 0.8 cm) aumentando su longitud tanto como sea necesario y posible, y por otro lado desde que se utilizan separadores ya no se hacen cortes profundos sino una incisión muy superficial por lo que esta técnica ha perdido su “agresividad”.
Se selecciona una banda más o menos larga, en función de la cantidad de pelo que necesitemos trasplantar, y se rasura. Después, se hace una incisión a nivel superficial de la piel y con la ayuda de los despegadores, se extrae la tira que contiene los folículos pilosos. A continuación se sutura la piel y la cicatriz quedará inmediatamente tapada por el pelo del paciente.
Con las modernas técnicas de sutura la cicatriz será indetectable, en cualquier caso, si el pelo del paciente tiene más de 5mms de longitud y en la mayor parte de los pacientes es difícil “encontrarla”, incluso con el pelo muy cortito.
Permite obtener un mayor número de Unidades Foliculares y más “robustas” garantizándose la supervivencia de prácticamente el 100% de las unidades siempre que se cuente con equipos con alta destreza y profesionalidad. No necesita “rasurado” y tiene un menor coste.
La cicatriz podría ser visible en algunos pacientes, si se afeitan la cabeza o si la calvicie avanza por una mala selección de la zona dadora.
Pacientes con calvicie extensa, zona dadora poco extensa y/o con poca densidad, pacientes que quieran evitar rasurado y desean obtener la mejor relación coste-beneficio.